Con la implementación del nuevo modelo curricular, uno de los aspectos que se ha incorporado a la formación del estudiante son los llamados “grupos estables”.

A partir de las 3:00 de la tarde, “todos los muchachos deben estar en actividades simultáneas; agroecológica, recreativa, física o científica, herrería, peluquería. Es decir, todo lo que son artes y oficios, recreación, deportes, habilidades y destrezas”, explicó la profesora Eira Brito, directora del Liceo Gilda Ramírez y coordinadora del eje 11 -circuito 2- que abarca 10 instituciones educativas.

La docente recordó que desde el pasado mes de julio los directivos, profesores y preparadores evaluaron esas actividades de formación, y durante la primera semana de clases se realizó un diagnóstico para que los estudiantes se identificaran y se integraran a la conformación de los grupos estables. “Esto se hace de acuerdo a lo que ellos seleccionen y no porque se obliguen a cursar lo que se les va a dar y ya”, aclaró.

Brito también resaltó que en los grupos estables los conocimientos pueden ser impartidos por docentes o cualquier otro personal de la institución, un aliado de la comunidad o representantes.

Todo es currículo

En años anteriores, las actividades prácticas se enseñaban en una materia denominada “educación para en trabajo”, era impartida por un profesor e impuesta en el pénsum.

Otras áreas como las recreativas, físicas, científicas y artes se desarrollaban como extracurriculares o extracátedra.
“Ahora todo está en el currículo”, enfatizó Brito, subrayando que se trata de un beneficio porque se establece para el educador un horario integral como “jornada laboral”, reconociendo el trabajo que antes no era tomado como horas efectivas de labor docente.

Para el estudiante también se incluye el desarrollo de habilidades y destrezas como parte del conocimiento holístico. Garantizando así una formación completa.

Aryluc Rojas
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